El Servizo Galego de Saúde ha sido condenado por no brindar una atención diligente a una mujer que sufrió un ictus. Los síntomas iniciales de su infarto cerebral fueron confundidos con una ciática, lo que llevó a no darle la debida importancia. Esta falta de atención resultó en graves consecuencias, ya que la paciente sufrió una hemorragia cerebral que se extendió y le causó una gran discapacidad.
Actualmente vive en una residencia privada y está bajo la tutela de su hija. El Tribunal Superior de Xustiza de Galicia ha dictaminado que el Sergas debe indemnizar a las hijas de la paciente con 30.000 euros.
En 2017, la mujer acudió al centro de salud de Tui acompañada de su hija. En ese momento, tenía 55 años y manifestó tener adormecimiento y debilidad en la pierna izquierda. Según el médico, esto ya había ocurrido dos veces esa mañana, aunque había mejorado en las últimas horas.
El médico del centro de salud diagnosticó que se trataba de una ciática, una afección en la cual las vértebras lumbares comprimen el nervio ciático. Esta lesión suele irradiar dolor hacia la pierna. El médico también sugirió que podría deberse a una mala postura al dormir. Se le recetaron medicamentos y se programó una revisión para una semana después.
Empeoramiento y sospecha de ictus
Sin embargo, a los cinco días, la paciente no solo recuperó la pérdida de sensibilidad en la pierna izquierda, sino que también perdió la sensibilidad en el brazo. Fue remitida al Hospital Álvaro Cunqueiro de Vigo desde el centro de salud de Tui. En urgencias, fue evaluada y se decidió dejarla ingresada debido a la sospecha de un posible ictus.
Al día siguiente, la paciente despertó con una parálisis en la mitad del cuerpo y sin capacidad para hablar. Las pruebas médicas revelaron que las arterias carótidas estaban obstruidas, lo que dificultó todos los tratamientos que se consideraron o intentaron. La hemorragia se extendió y las imágenes mostraron múltiples lesiones cerebrales producto del ictus. Estas lesiones resultaron irreversibles, lo que llevó a la incapacidad de la paciente y su ingreso en una residencia.
La condena y posibilidad de recurso
Inicialmente, la condena por negligencia médica fue de 20.000 euros. Sin embargo, la alta sala ha elevado esta cantidad en un 50%, llegando a los 30.000 euros, más los intereses correspondientes. El Sergas tiene la opción de presentar un recurso de casación ante el Tribunal Supremo.
- Te recomendamos -
