En un suceso que ha sacudido a la comarca de O Morrazo, un taxista de 65 años ha sido arrestado por la Guardia Civil de Cangas bajo la acusación de cometer dos delitos de agresión sexual contra menores. Este caso ha emergido a raíz de una denuncia interpuesta en el Cuartel de la Guardia Civil de Cangas do Morrazo.
Detalles inquietantes del abuso
La denuncia inicial fue presentada por una menor, quien relató un incidente ocurrido en el taxi mientras regresaba de madrugada desde Cangas a Moaña, acompañada inicialmente por una amiga. Según el informe de la Guardia Civil, el taxista se aprovechó del momento en que la joven quedó sola, deteniendo el vehículo y realizando actos inapropiados.
Le hizo comentarios sobre su físico, le acarició una pierna, intentó desvestirla y le propuso un acto sexual a cambio de no cobrarle el servicio. La situación cesó cuando la menor fingió una llamada a su madre, siendo finalmente dejada en su casa.
En otro incidente, se informó que el mismo taxista pidió a otra menor que le diera un beso. Ambos casos, ahora bajo investigación, han sido remitidos al Juzgado de Guardia de Cangas y a la Fiscalía. El taxista, mientras tanto, permanece en libertad a la espera de citación judicial.
Repercusiones en el sector del taxi
La Asociación del taxi de Cangas, representada por su presidente José Novas, ha expresado su sorpresa y preocupación por el impacto negativo de este suceso en la reputación del sector. Esta situación se suma a un caso reciente de un taxista en Bueu detenido por tráfico de drogas, exacerbando la desconfianza hacia los taxistas en la región, especialmente entre los padres.
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